De hecho, todavía no tiene un certificado de ocupación de la ciudad, lo que significa que no es legal vivir allí. Muchas son las celebrities y millonarios que se han entusiasmado en comprar esta mansión desarrollada por Bruce Makowsky y que tomó el trono que hasta la actualidad ocupaban la mansión Playboy -valorada en 200 millones de dólares- y otra situada en Manalapan, Florida, que se vendió por 195 millones. «Desde el instante en que llegas a la propiedad de Kersey Valley, eres el blanco justo para todas y cada una de las miradas de las criaturas encantadas que residen ahí». Esta casa encantada proporciona un paseo muy variado y detallado como si de una auténtica pequeña ciudad de niveles espeluznantes se tratara. Entre ellas estaba Emma, la hija de Tiedemann, que supuestamente murió gracias a adversidades con la diabetes.
A lo largo de 4 años, más de 300 personas han estado haciendo un trabajo en la mansión de Bel Air. “Quería llevar a cabo algo más que una vivienda”, explicaba Makowsky al medio estadounidense experto en información económica. “En todo instante, aspiré a crear un estilo de vida”, agregaba este hombre de negocios que, además de en la construcción, está invirtiendo una fortuna en conseguir al que será para él cliente adecuado. “Buscaba redefinir el concepto de hogar, romper los moldes. Recrear más adelante dueño el sentimiento mucho más gratificante de todos y cada uno de los que tienen la posibilidad de nacer entre cuatro paredes”, sentencia el empresario. Si la propiedad se adjudica por el precio solicitado, será la vivienda más cara vendida en Estados Unidos, y puede además de esto batir récords por venir a transformarse en la mayor compra en línea de la historia. Situada en la ladera de una colina de la muy elegante y exclusiva región de Bel Air, en Los Ángeles, se pondrá en venta por la cifra 295 millones de dólares (260 millones de euros).
Casa Encantada – $225 Millones
Las malas lenguas aseguran que ciertos trabajaron a lo largo de múltiples años antes de encontrar el camino de regreso a casa. Desde ese momento, se dice que los túneles están frecuentados por los espíritus agraviados de los cautivos que murieron en los oscuros recovecos debajo de la región. Uno de los primeros crímenes estadounidense que se desarrolló bajo la atención de los medios fue la situacion ‘Borden’. El 4 de agosto de 1892, los cuerpos de Andrew y Abby Borden fueron descubiertos apaleados e irreconocibles en su casa.
Con sus 9.754 m2, esta mansión en Bel Air podría convertirse en la propiedad privada más cara de Estados Unidos cuando salga a subasta el próximo mes de febrero. A diferencia de las mansiones que postergan el aparataje eléctrico a los sótanos, entre calderas y el cuarto de las escobas, los creadores de “The One” desearon realizar gala del músculo tecnológico del complejo. No solo con enormes pantallas y electrodomésticos, desplegados a lo largo y ancho de la construcción; también, y esa es su enorme peculiaridad, con su sala de servidores, situada en un cuarto acristalado, a la vera de uno de sus salones. En lo que se refiere al polémico precio, Makowsky se justifica explicando que esta mansión de California no debe compararse a ninguna otra, si no con un yate de gran lujo. “En esos términos, y dado que la vivienda de Bel Air es para toda la existencia, el valor es mucho más que razonable”. En el importe eso sí, está incluyendo el servicio a lo largo de un par de años de un equipo mínimo de siete personas de servicio (incluyendo un chófer, un masajista y un chef).
La Casa Más Cara De Estados Unidos: Una Sala De Cine Y Un Helicóptero
Esta megamansión se vende por 295 millones de dólares americanos, precio que hace sombra a las casas más exclusivas de España. A la colección de coches clásicos, hay que agregarle diez motocicletas y un helipuerto. Entre el mobiliario destaca una cámara Leica enorme valorada en un millón de euros.
The One se presenta como un oasis del que, sus nuevos dueños, no precisarán salir. La vivienda principal está cercada por un foso en tres de sus lados y tiene una superficie de 3.000 m2. Cada habitación está meticulosamente decorada con una paleta neutra que rinde homenaje al impresionante paisaje y sostiene la cohesión de toda la propiedad a pesar de su asombrosa escala. Esta salón llena de servidores sirve para supervisar cada dispositivo tecnológico de la vivienda, como el computador de Odisea 2001. Luces, sistemas de calefacción, pantallas de cine, máquinas de gimnasio y un sin fin de detalles digitales se controlan desde esa sala que está en la región del garaje y a la que se ingresa mediante un pasillo lleno de baños. Cuenta la historia de historia legendaria, por servirnos de un ejemplo, que el presidente Ronald Reagan entretuvo más de una vez a los invitados de una cena con historias de su perro ladrando a fantasmas invisibles y que su hija, Maureen, despertó con una figura transparente mirando por la ventana del dormitorio Lincoln.
Entre los obsequios que dejó allí Makowsky resaltan una compilación de coches tradicionales valorada en 30 millones de dólares. “Cuanto mucho más, mejor” este parece ser el lema de quién ha desarrollado The One, la vivienda más cara de los Estados Unidos. Una mansión repleta de piscinas, 49 baños y un cerebro tecnológico que controla toda la vivienda.
Ubicada en Bel Air, Los Ángeles, California, esta mansión valorada en 250 millones de dólares bate récords en cuento a cantidades se refiere. Consta de 12 habitaciones, 21 cuartos de baño, tres cocinas, seis salones, una cuarta parte de masaje, un spa, una salón fitness, 2 bodegas de vino y champán, una sala de cine familiar y una piscina de 25 m2. Dentro de su elevado precio se incluye una colección de coches tradicionales valorada en 30 millones de dólares americanos, maravillas artísticas y mobiliario de Roberto Cavalli. 3.500 metros cuadrados en los que puedes localizar doce habitaciones, 21 cuartos de baño, tres cocinas y seis salones, una cuarta parte de masaje, un spa, una salón fitness, una de juegos, 2 bodegas de vino y champán, una salón de cine familiar y una piscina de 25 metros cuadrados.
Su precio de 295 millones es casi el límite que se necesita para contemplar la deuda de los constructores. De momento, no se conoce quién va a ser el próximo dueño de esta inmensa vivienda, pero seguro que en más de una ocasión se confunde de baño. El dueño originario de la única propiedad es el promotor Nile Niami, un ex- productor de cine y popular personaje del show business estadounidense. La construcción de The One produjo deudas millonarias a su empresa, que acabó declarándose en bancarrota. Estos son solo algunos de los nombres que van a resplandecer al charlar de lujos hogareños.
La Casa Más Cara De Eeuu Cuesta 295 Millones Y Es Tan, Tan Domótica Que Tiene Su Sala De Servidores
La piscina cuenta con pantallas hidráulicas que se tienen la posibilidad de ocultar si no te gusta ver Netflix mientras tomas el sol. Tiene su propia bolera con cuatro pistas, un putting green, un gimnasio de nueva generación equipado con máquinas de Technogym y un bar de jugos, una pista de tenis, una increíble bodega y un estacionamiento con dos plataformas giratorias en el que caben mucho más de 30 vehículos. Nuestro hogar, las 4 paredes en las que nos desarrollamos, pasamos momento de libertad, compartimos con nuestra familia y, en los últimos tiempos, estamos trabajando. Nuestro hogar es nuestro ubicación de mayor esparcimiento, ese espacio donde nos sentimos a gusto y podemos relajarnos, desconectar del ajetreo de nuestra vida día tras día y poder disfrutar tranquilos de un tiempo en solitario o con nuestros conocidos cercanos. Las podemos encontrar grandes y pequeñas, sencillas o más desarrolladas, minimalistas o llenas de personalidad, sea como sea la manera o estilo de nuestro hogar, tenemos la posibilidad de identificarnos fácilmente con estas tendencias. En el área de los USA podemos encontrar ciertas viviendas mucho más estrafalarias, suntuosas, llamativas, costosas o todo lo previo junto, bien sea por su diseño, su alto grado de seguridad de puertas y ventanas, o simplemente por lo único de su dueño.
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La mansión más cara de Estados Unidos se ha vendido por 126 millones de dólares estadounidenses (115 millones de euros al cambio) en una subasta sin pujas mínimas ni reservas. El comprador, cuya identidad no ha trascendido, tendrá que abonar una prima de subasta de 15 millones, por lo que la factura total sube a 141 millones, según comunica The Wall Street Journal. “The One” semeja una mansión de película y en cierta manera, ciertamente, tiene nudos con la industria del cine.